lunes, 21 de julio de 2014

El aire huele a invierno

Me sorprendí la tarde del Miércoles bajando del Ajusco en moto hacia el DF. cuando volvió ese olor que se percibe en el cambio de temporada y es específico del invierno: fresco, melancólico, tranquilizador y nostálgico. Es causa de emoción por las cosas que han de suceder y motivo para recordar las historias que hubieron de ocurrir, razón para tomar fuerza y gusto en las actividades diarias. Placer de dejarme sorprender una y otra vez por los recuerdos que vienen, los que se han de quedar, y los que por fuerza se han de ir. Es el primero de tantos días que faltan para terminar la estación que comienza y los días que he de disfrutar. Hoy, tranquilo, me dedico a sentir que el aire ya huele a invierno...